Las partituras, que permanecieron ocultas, fueron rescatadas por el Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información Musical Carlos Chávez
Se trata de cuatro piezas coreográficas cuya música original y diseño sonoro fue compuesto por 6 compositores emergentes, quienes trabajaron durante meses en el Taller de Música para las Artes Escénicas del Centro de Creadores Musicales.